Apéndice...
...Extractos de un
delirio que sana el Alma...
...Disfruto mi delirio, amo mi
delirio, mi delirio es mi mejor medicina (refrigerio para mis huesos), mi
delirio es mi esperanza, mi delirio es mi consigna sagrada dirigida hacia
ningún espectador, mi delirio es mi sueño y mi propósito, mi delirio es mi
alimento, mi delirio es mi amanecer, mi
delirio es mi pasaporte con visa indefinida al cielo, mi delirio soy yo
mismo en apoteosis constante que un día los fármacos no podrán aprisionar más,
y entonces Dios pondrá cada cosa en su justo lugar...
PREMISAS
FALSAS:
...Esta
es una frase que me suena tan cariñosa. Todo buen esquizofrénico o persona de
“mente creativa”, debe saber que seguramente llega a conclusiones sobre la
maravillosa y estupenda base de las PREMISAS FALSAS, que son básicas para la vida, pensar que tanta gente
las usa sin saberlo y sin embargo creen que pueden afrontar la vida con ellas.
A mí me gustan mucho mis premisas, las acaricio y devoro cada día en los
escondrijos de mi mente y no se las impongo a nadie, simplemente dejo que ellas
sean y brillen por sí solas. Que bellas son estas premisas “falsas de toda
falsedad”, y pensar que mi pequeña vida, perdón... mi fantabulosa Vida
esquizofrénica no hace ningún esfuerzo para tenerlas, simplemente ellas están
allí... y me obedecen... de manera incondicional...
Construir una verdad...
...Parece increíble... que
alguien como yo, que se ufana de admitir que no vive explícitamente de la
verdad, en el fondo está construyendo una verdad... quizá defectuosa, quizá
equivocada, quizá realmente basada en aquellas cariñosas “premisas falsas” que
tanto alimentaron y siguen alimentando mi alma... pero quizá, al fin verdad...
especialmente para mí mismo, principal consumidor de este producto: la nueva
verdad, mi verdad, aquella que me cuesta tanto definir y “creer”. Muchas personas han querido construir sus
verdades, unos fracasan y otros siguen teniendo éxito... ¿Cómo hemos de
vivir?... se supone que la verdad triunfa sobre la mentira. La diferencia está en que cuando uno está
flotando sobre la nada para darle forma a algo, esto no es algo que no viene
“como quien dice” hecho, sino que esto es algo a lo hay que colocarle demasiado
coraje, y sobre lo cual hay que luchar, y mucho... para soportar la presión de
aquel paquetico horrendo que te quieren meter por los ojos: ¡Cómprelo,
Cómprelo, Cómprelo, Cómprelo! Porque el
mundo (y la generalidad de sus habitantes) siguió y seguirá siempre funcionando
bajo una racionalidad muy específica... Qué fácil es aspirar a la gloria con
palabras prestadas, con promesas ajenas, con esfuerzos de otro... Así que
muchas cosas se han dicho y hecho:
demasiadas, a la larga... han de desecharse, por lo menos las que respectan a
las de mi consumo personal... no sé los demás qué harán con su viejo baúl de
verdades... lo milagroso para muchos, les habla de que eso es verdadero. Mantengo mi posición: Yo no vivo de la
verdad... pero espero un milagro muy grande, tan grande que no lo puedo
contar...
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En la Bondad de Dios
espero haber cumplido con mi deber y mi misión de vida completamente…
AMÉN…
…Juan Bernardo…
...Con el Corazón en la mano...